Alejandro Toledo no es santo de mi devoción, pero la denuncia hecha en la víspera por el congresista Gustavo Espinoza es, a todas luces, una cortina de humo para distraer a la opinión pública de otros temas, entre ellos, la censura al ministro del Interior, Luis Alva Castro.
Y gran parte de los bloggers locales tampoco se ha tragado el anzuelo.